Es bien sabido que la lavanda es una planta resistente que prospera muy bien en todo tipo de espacios e incluso condiciones climáticas, pero esto no quiere decir que sea inmortal o que no pueda enfermarse. Si bien se trata de algo que es poco frecuente, igualmente debes estar atento a las señales de los problemas de la lavanda para detectarlos y actuar a tiempo.
La planta de lavanda es una opción aromática que puede crecer bien en cualquier espacio, pero no está exenta de padecer enfermedades, plagas e incluso hongos en algunas ocasiones. Así que, si la quieres tener en tu jardín siempre sana y fuerte, desde Can Juanito te hablaremos de sus problemas, cómo detectarlos y solucionarlos a tiempo.
¿Cuáles son los problemas frecuentes en la lavanda?
Existen diversos tipos de problemas que pueden afectar a tu planta de lavanda y estos pueden hacerse notar de diversas maneras, algunas a través de señales claras y otras que pueden no ser tan obvias. Por ello, a continuación, te hablaremos sobre los principales problemas de la lavanda y cuáles son las señales que te pueden indicar su presencia:
Lavanda con un crecimiento débil
Si sientes que tu planta está teniendo un crecimiento débil, no ha alcanzado la altura que debería para su tiempo o los tallos se mantienen delgados y se caen constantemente, esto puede deberse a un problema a nivel radicular. Ya que, en las plantas, si hay un problema en las raíces, hay un problema en todo el cultivo.
Ante esta señal, lo más probable es que la lavanda no esté desarrollando raíces fuertes y para solventarlo necesitas verificar el estado de su suelo. Por lo general, los suelos que son pesados o arcillosos retienen más humedad de la necesaria, lo que puede generar una pudrición en sus raíces. Por ello, lo mejor es optar por un suelo que sea bien drenado para evitar esto.
Lavanda con hojas de color amarillo y grises
Lo normal en una planta, en especial en una de hojas perennes como la lavanda, es que estas mantengan su color verde brillante e intenso por mucho tiempo. Por lo tanto, si notas que estas empiezan a perder su color y tonarse amarillentas, es señal de un problema.
En la mayoría de los casos también puede ser signo de un problema en las raíces y de un crecimiento que se torna cada vez más débil, pero también puede deberse a la presencia de hongos debido a una alta y prolongada exposición a la humedad. De allí que mantener a raya al agua que se le da sea tan importante.
Lavanda con hojas deformadas
Cuando percibes que la planta está desarrollando hojas deformadas o con manchas notorias, incluso en los brotes nuevos, es posible que la lavanda tenga algún tipo de plaga en su follaje, como puede ser el caso de áfidos, trips, pulgones, entre otros.
Por lo general, este tipo de insectos se alimentan de forma directa de los tejidos de la planta, lo que hace que su vigor se reduzca y se debilite. Además, esto es un caso preocupante, ya que las plagas suelen propagarse con rapidez entre las plantas, por lo que si tu lavanda tiene, es posible que comiencen a saltar hacia los demás cultivos del jardín. En este sentido, es fundamental actuar a tiempo con un insecticida adecuado según el tipo de insecto en cuestión.
Lavanda con tallos desordenados
Entre los problemas de la lavanda también es posible que notes que algunas ramas tienen sus tallos deformados y no están creciendo como deberían. Cuando esto sucede, lo más probable es que sea la respuesta natural de la planta a una poda que fue efectuada en el momento incorrecto y que redujo de forma notable la producción de nuevos brotes y flores. Lo ideal, es darle una poda a la planta durante el verano, específicamente luego de que haya pasado su momento de floración.
Lavanda con hongos
Por último, es importante destacar que los hongos son otros de los problemas de la lavanda que suelen ser frecuentes, en especial cuando el riego que se le da al cultivo resulta excesivo para una planta como esta. Ahora bien, es importante reconocer que existen diversos tipos de hongos, como moho gris, phoma o el armillaria melea, y cada uno puede tener una forma de aparición distinta.
No obstante, por lo general suelen hacer acto de presencia en la parte superior del suelo, en las hojas, tallos o incluso cubriendo todas sus flores con un moho de color blanco, como si hubiera nevado por la noche. Según la cantidad de hongo, puede ser posible eliminar estos con el uso de un fungicida adecuado, pero si es muy tarde, existe una alta posibilidad de que tengas que desechar la planta. De allí que sea tan importante estar atento a todas las señales que puede darte tu lavanda.

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¿Cómo detectar las plagas y enfermedades a tiempo?
Por supuesto, al tener una planta de lavanda en casa, tienes que estar muy atento a su desarrollo, crecimiento y necesidades. A pesar de que no requiera de un mantenimiento muy detallado, de igual forma requiere de algunos cuidados básicos para prosperar y florecer. Así que, cada vez que riegues o revises tu ejemplar de lavanda, te recomendamos:
Verificar que no haya exceso de humedad y que el suelo no esté encharcado
Como ya lo sabes, el exceso de agua es uno de los principales problemas al cuidar de una planta, en especial de una como la lavanda que está adaptada a climas secos y que no necesita crecer en ambientes con demasiada humedad. Por ese motivo, lo mejor que puedes hacer para mantener tu planta saludable es tener especial cuidado con el riego.
A veces, menos es más, y en el caso de la lavanda es algo que se aplica. Es preferible echarle menos agua de la debida a excederse con los riegos. En este sentido, lo mejor que puedes hacer es regar solamente cuando notes que el sustrato ya se encuentra por completo seco, si todavía lo percibes un poco húmedo, será mejor esperar un día más antes de volver a regar.
Revisar el revés de las hojas y las flores para detectar la presencia de insectos
Las plagas de insectos en las plantas suelen aparecer también de manera inesperada y muchas veces nos damos cuenta de ello cuando ya hay demasiados de estos y se vuelve algo bastante notable. Para actuar a tiempo, cada vez que vayas a regar la planta, puedes echarle un vistazo al revés de sus hojas o flores con sumo cuidado. Al hacer esto con regularidad, podrás detectar la presencia de bichos a tiempo, cuando apenas haya algunos y pueda ser algo más tratable.
Estar atento a los cambios en la tonalidad de las hojas
Como ya lo sabes, las hojas de tus plantas son las primeras que te dirán si existe algún problema, así que para prevenir los problemas de la lavanda, es fundamental que te mantengas alerta para percibir cualquier tipo de cambio que pueda afectar el tono de las hojas en cuestión. Tanto si se tornan amarillas, como si pasan a tener un color gris descolorido, puede ser una señal clara de que algo está afectando a tu cultivo.
Cuidados esenciales para evitar que la lavanda se enferme
Por supuesto, los problemas de la lavanda siempre pueden ser evitados si se le da a la planta todos los cuidados que ella necesita para crecer sana y tener una floración abundante. Por suerte, al ser un cultivo resistente, los cuidados de la lavanda son muy sencillos de seguir y garantizárselos con regularidad te permitirá evitar la generación de cualquier tipo de problema, plaga o enfermedad. Así que, algunos de los tips a seguir sobre su mantenimiento son:
- Regar entre dos y tres veces por semana en verano y una vez a la semana en el invierno.
- Ubicar la lavanda en el exterior en donde reciba una buena cantidad de luz solar.
- Siémbrala en un suelo ligero y arenoso para que la tierra no se encharque.
- Utiliza una maceta con un buen drenaje para que el agua de los riegos no se estanque.
- Aplicar fertilizante al menos una vez por año durante los primeros días de la primavera.
Conclusión
Los problemas de la lavanda pueden aparecer en cualquier momento, en especial cuando menos los esperamos, pero por ello es importante saber leer las señales que te envía la planta y actuar a tiempo conforme a la enfermedad que pueda tener. Si se reconoce con suficiente tiempo de antelación, es posible darle el tratamiento que necesita para mejorarse y seguir con su crecimiento. Además, al cuidarla con detalle y mucha atención, podrás prevenir algunas de sus enfermedades más comunes.
Fuentes y referencias:
- Purplant (https://www.purplant.es/guia-problemas-plantas/lavanda/).
- Botanical online (https://www.botanical-online.com/cultivo/lavanda-cultivo-enfermedades-plagas).
- Jardinero Madrid (https://www.jardineromadrid.es/lavanda-cuidados).








