El hibiscus es un arbusto que pertenece a la familia de las malváceas. También se conoce como hibisco y es una planta que proviene de Asia Oriental.
Lo que más decanta del hibisco son sus flores llamativas que crecen en abundancia. Podando adecuadamente se puede mantener su tamaño. Si lo dejas crecer se convertirá en un árbol que puede alcanzar hasta los 5 metros de altura.
Es una planta perfecta si quieres dar un toque tropical y colorido a tu jardín. Este arbusto suele tener flores rojas o blancas, incluso puede variar en otros colores como el fucsia o el amarillo.
Características
- Tipo de planta: Arbusto o pequeño árbol perenne.
- Nombre técnico: Hibiscus spp.
- Nombres comunes: Hibisco, rosa de China.
Condiciones de cultivo
- Luz: Prefiere luz solar directa. Necesita al menos 6 horas de sol directo al día para una floración abundante.
- Situación: Ideal para jardines soleados, bordes o como planta en macetas. También se cultiva con frecuencia en climas cálidos como planta ornamental.
- Temperatura: Prefiere temperaturas cálidas entre 20°C y 30°C. No tolera el frío y debe protegerse de las heladas.
- Riego: Necesita riego frecuente, especialmente en la temporada de crecimiento. Mantén el suelo húmedo, pero bien drenado.
- Suelo: Prefiere suelos bien drenados, ligeramente ácidos o neutros. Un sustrato rico en materia orgánica es ideal.
- Abonado: Fertilizar durante la temporada de crecimiento con un fertilizante equilibrado o uno específico para plantas con flores.
- Poda: Poda después de la floración para eliminar ramas muertas o dañadas y para mantener la forma del arbusto. También puede recortarse para estimular un crecimiento denso.