Las plantas crasas, también conocidas como suculentas, son una opción popular para quienes buscan una planta atractiva, de bajo mantenimiento y capaz de sobrevivir en diversos entornos. Su capacidad para almacenar agua las hace ideales para principiantes y expertos en jardinería. Por ello, hoy en Can Juanito, te enseñaremos todo lo que necesitas saber sobre los cuidados de las crasas o suculentas.
¿Qué son las plantas crasas o plantas suculentas?
Las crasas son plantas suculentas que almacenan agua en sus hojas, tallos o raíces y es un tipo de planta que familia de las cactáceas (cactus). Los cactus y suculentas, son originarias de climas áridos, son famosas por su resistencia y su capacidad de adaptarse a ambientes hostiles, por lo que crecen bien como plantas de interior. Ejemplos populares incluyen el aloe vera y el jade, aunque no todos los cactus son crasas, ya que existen una gran variedad de ellas.
Factores esenciales para el cuidado de las crasas
Aprender cómo cuidar las plantas suculentas es muy sencillo, ya que es un cultivo resistente. Sin embargo, requieren ciertas condiciones específicas para mantenerse saludables. Por ello, aquí desglosamos los aspectos más importantes que necesitas conocer para garantizar los cuidados básicos que las suculentas necesitan:
Mucha luz solar
Primero que nada, hay que destacar que las crasas necesitan luz solar abundante, pero no se trata de luz del sol directo durante largas horas. Al contrario, lo ideal es que reciban entre 4 y 6 horas de luz al día. Si las hojas comienzan a alargarse o perder su color vibrante, puede ser una señal de falta de luz. En interiores, colócalas cerca de una ventana orientada al sur o al este.
Riego adecuado
El riego es probablemente el aspecto más crítico en el cuidado de las crasas, ya que el exceso de agua puede generarle muchos años. Así que, para asegurarte de que no les generarás un exceso de riego, ten en cuenta los siguientes factores:
- Frecuencia: riega solo cuando el sustrato esté completamente seco. Esto puede ser una vez cada quince días en invierno y una vez por semana en verano.
- Método: usa la técnica de “riego profundo”, asegurándote de que el agua salga por los agujeros de drenaje. Nunca dejes agua estancada en el plato debajo de la maceta.
- Advertencia: evita regar las hojas directamente, ya que la acumulación de agua puede causar la pudrición de las mismas o puede fomentar la aparición de plagas.
Sustrato y buen drenaje
Las crasas son plantas perfectas para tener dentro de casa, ya que son plantas muy resistentes. No obstante, para mantener esta característica de ellas, tienes que saber que el sustrato ideal para crasas debe ser ligero y bien drenado.
Opta por mezclas específicas para suculentas o crea la tuya combinando tierra, arena gruesa y perlita. El drenaje es fundamental para evitar el exceso de humedad, que puede causar raíces podridas. Además, el uso del sustrato correcto también puede favorecer la floración de las especies que tienen flor.
Temperatura y humedad
Otra de los cuidados de las suculentas a tener en cuenta tiene que ver con el clima que prefieren. Las crasas prefieren temperaturas cálidas y ambientes secos. Son sensibles al frío extremo, por lo que si vives en una zona con inviernos severos, mantenlas en interiores durante esa estación. La humedad alta puede ser perjudicial; por ello, evita colocarlas en baños o cocinas mal ventiladas.
Fertilización para crasas y suculentas
Aunque las cactus y las crasas no son plantas exigentes, un poco de fertilizante puede mejorar su crecimiento. Usa un abono equilibrado para suculentas durante la primavera y el verano, aproximadamente una vez al mes. En otoño e invierno, evita fertilizar, ya que las plantas entran en un período de descanso. Cuando quieras trasplantar una de tus plantas crasas o suculentas, te vendrá bien agregar un poco de abono a la nueva tierra.
Problemas comunes al cuidar las crasas y cómo solucionarlos
Incluso con el mejor cuidado, las crasas pueden enfrentar problemas. Aquí te explicamos cómo identificarlos y resolverlos de manera rápida y sencilla:
Hojas blandas o marchitas
- Causa: riego excesivo.
- Solución: deja de regar y revisa las raíces. Si están podridas, corta las partes afectadas y replanta en sustrato seco.
Hojas quemadas o con manchas marrones
- Causa: exposición directa al sol intenso.
- Solución: coloca la planta en un lugar con luz filtrada.
Crecimiento estirado
- Causa: falta de luz.
- Solución: mueve la planta a un lugar más iluminado y considera usar luces de crecimiento.
Propagación de crasas: Un placer sencillo
Una de las mayores ventajas de las crasas es su facilidad para propagarse. Este proceso no solo es económico, sino también muy gratificante. Para propagar las plantas crasas y suculentas de la forma adecuada, igue estos pasos:
- Selecciona una hoja o esqueje saludable: asegúrate de que esté libre de enfermedades o daños.
- Déjalo secar: deja que la hoja o el esqueje se seque durante 1-2 días para que se forme un callo.
- Plántalo: coloca el esqueje en un sustrato adecuado, sin enterrarlo demasiado.
- Espera el crecimiento: con el tiempo, aparecerán raíces y nuevas hojas.
Consejos avanzados sobre los cuidados de las plantas crasas
- Rotación: gira las macetas ocasionalmente para asegurar un crecimiento uniforme hacia la luz.
- Macetas adecuadas: usa recipientes con agujeros de drenaje. Las macetas de terracota son ideales porque permiten que el exceso de humedad se evapore.
- Limpieza: limpia las hojas con un pincel suave para eliminar polvo y mantener la planta saludable.
Conclusión
Ahora que ya conoces los cuidados de las crasas o suculentas, ya habás descubierto que son fáciles de cultivar y la experiencia es bastante similar a la de cuidar un cactus. Estas plantas no solo embellecen cualquier espacio, sino que también requieren un cuidado mínimo, ideal para estilos de vida ocupados. Con los consejos que te hemos dado en Can Juanito, tu crasa estará siempre en las mejores condiciones. Recuerda: menos es más cuando se trata de estas maravillosas plantas.